Los requerimientos de ácidos grasos esenciales (AGEs) y ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga (AGPI-CL) durante los últimos meses de gestación y los primeros años de vida son importantes de acuerdo al crecimiento y desarrollo neuronal que está teniendo lugar durante este periodo de vida.
El objetivo de este trabajo ha sido destacar la importancia de garantizar un correcta ingesta de AGEs para cubrir los requerimientos nutricionales de estos, a través de la ingesta de alimentos que contienen en su composición nutricional a estos ácidos de forma natural o han sido enriquecidos con ellos.
La metodología empleada para este fin ha sido la utilización de bases de datos electrónicas como MedLine, ScienceDirect, Scirus, Trip database y de la hemeroteca científica de la Universidad de Murcia; También han sido consultadas las páginas web de organismos nacionales e internacionales tales como la Asociación Española de Pediatría (AEP), Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) y European Society of Pediatric, Gastroenterology, Health and Nutrition (ESPGHAN).
Los resultados obtenidos muestran como los AGEs e incluso los AGPI-CL (DHA y ARA) son esenciales para el correcto desarrollo del lactante y niño de corta edad; pues aún estando el lactante desde el primer día de vida dotado de todo el sistema enzimático necesario para la conversión de AGEs en sus correspondientes AGPI-CL y sus derivados, esta conversión podría ser insuficiente, siendo necesario y/o esencial el aporte de estos AGPI-CL a través de la dieta.
Las conclusiones derivadas de este trabajo fueron que durante los seis primeros meses de vida el aporte de AGEs y AGPI-CL está asegurado a través de la leche materna o en su defecto a través de las fórmulas de inicio; a partir de los 6 meses con la introducción de la alimentación complementaria y la introducción de la leche de vaca a partir de los 12 meses de vida (introducción en contra de las recomendaciones de ESPGHAN), podría verse comprometida la aportación de estos ácidos. Existe un vacío legal en cuanto a la aportación de AGEs a través de la alimentación complementaria distinta a los cereales; sin embargo, comités como el de la AEP recomienda que en los tarritos infantiles de carnes y pescados con verdura, el aporte de AL sea entre 3-4.5% de la energía de la dieta y al menos 0.5% desde ALN para satisfacer los requerimientos de AGEs en lactantes y niños de corta edad.
Essential fatty acids and long-chain unsaturated fatty acids are important for growth and neuronal development during the final months of gestation and the early years of life.
The aim of this study is to highlight the importance of ensuring a correct intake of EFAs for nutritional requirements through the intake of foods which naturally contain these acids or which have been enriched with them.
The methodology used was basee on the review of electronic databases MedLine, ScienceDirect, Scirus, Trip database and that of the scientific journal library of the University of Murcia. National and international websites such as the Asociación Española de Pediatría (AEP), European Agency for Food Safety (EAFS) and the European Society of Pediatric, Gastroenterology, Health and Nutrition (ESPGHAN) were also consulted.
The results show how EFAs and also AGPI-CL (DHA and ARA) are essential for the correct development of breastfeeders and infants. Even though the breastfeeder is enzymatically fully equipped from the first day of life to convert EFAs into AGPI-CL and derivatives, the conversion may be insufficient and it may be necessary to include AGPI-CL in the diet.
The conclusions are that during the first 6 months of life the provision of EFAs and AGPI-CL is assured thanks to the mother�s milk or through starter formulas; at six months the introduction of complementary foods and the adaptation to cow�s milk at twelve months (against the recommendations of the ESPGHAN) may affect the provision of these acids. There is a legal vacuum in the issue of the provision of EFAs through complementary foods other than cereals although committees like the AEP recommend that AL in meat and fish baby foods with vegetables should suppose 3-4.5% of the energy provision, and ALN at least 0.5% in order to satisfy EFA requirements in breastfeeders ans infants.