La artrodesis es probablemente la técnica quirúrgica más empleada en la corrección de las deformidades que afectan a los dedos menores de los pies. A lo largo del pasado siglo asistimos al desarrollo de diversas modificaciones de esta técnica en una búsqueda por mejorar la estabilidad del procedimiento y garantizar la fusión articular en una posición correcta.
A partir de 1940 Taylor adaptó el uso de agujas K como sistema estándar de fijación en cirugía si bien este sistema cuenta con desventajas considerables que, de la mano del desarrollo tecnológico, han impulsado a muchos investigadores a desarrollar nuevos sistemas de fijación que minimicen los conocidos efectos adversos derivados del uso percutáneo de las populares agujas. De este modo, en las últimas décadas hemos asistido a un importante desarrollo de nuevos sistemas de fijación que aumentan las posibilidades del cirujano para enfrentarse a situaciones clínicas muy diversas.
En el presente artículo realizamos un breve análisis de los nuevos sistemas de fijación surgidos en los últimos años y contratamos la información proporcionada por las diferentes casas comerciales con la literatura científica disponible en un intento por esclarecer las ventajas e inconvenientes de cada uno de ellos