José Navarro Yepes
Introducción: la gran proliferación de guías, protocolos y otros intrumentos de apoyo a la decisión clínica en la prevención y tratamiento de las úlceras por presión (UPP) está acompañada de una amplia variabilidad que refleja inconsistencia y baja calidad de algunos documentos. La evaluación de las guías de práctica clínica (GPC) sobre úlceras por presión en España se hace difícil debido a que frecuentemente hay ausencia de elementos clave para su identificación. Así, al usuario de la GPC, antes de utilizarlas, le interesa averiguar si una guía es de calidad, válida, útil y fiable. Las GPC deben estar adaptadas a la población a la que se va a aplicar. Esto trae consigo la necesidad de someterlas a un proceso de análisis de su calidad.
Objetivos: determinar la calidad de las GPC sobre UPP mediante la versión española del instrumento AGREE. Comparar la calidad de las GPC de UPP utilizadas en el Sistema Nacional de Salud (SNS).
Material y métodos: este estudio pretende someter a evaluación mediante el intrumento AGREE (Appraisal of Guidelines Research and Evaluation) de 8 GPC sobre deterioro de la integridad cutánea, utilizadas en distintos hospitales del Sistema Nacional de Salud.
Resultados: al comparar las puntuaciones estandarizadas por áreas, obtenemos que 5 GPC superan los 60 puntos, siendo catalogadas como �muy recomendadas�, tres GPC con puntuaciones entre 60-30 puntos, catalogadas como �recomendadas con condiciones�. No se encontró ninguna GPC con puntuaciones inferiores a 30 puntos, catalogadas como �no recomendadas�.
Conclusiones: 1. El proceso de elaboración de una GPC en el deterioro de la integridad cutánea, es costoso, requiere mucho tiempo y recursos humanos, así como personal con experiencia en el desarrollo de guías, habilidades en la búsqueda bibliográfica y en lectura crítica de artículos, lo que supone una barrera importante para la elaboración de estas. 2. La adaptación de las GPC de alta calidad, basadas en la evidencia existentes, es una opción efectiva y eficiente que evita la duplicación innecesaria de esfuerzos y disminuye la variabilidad asistencial con el consecuente ahorro económico para el sistema de salud. 3. Si aparecen nuevas evidencias sobre las recomendaciones en la prevención y el tratamiento del deterioro del la integridad cutánea, es conveniente incorporarlos a la GPC adaptada. 4. Las guías con mayor rigor metodológico en su elaboración y que, por tanto, podrán ser recomendadas para su utilización son: Guía de Práctica Clínica de Enfermería: Prevención y Tratamiento de UPP y otras Heridas Crónicas. Agencia Valenciana de Salud y la Guía de Práctica Clínica para la Prevención y el Tratamiento de las UPP. Servicio Andaluz de Salud. 5. El instrumento AGREE no valora el impacto de una guía sobre los resultados en los pacientes, ni el contenido clínico de las recomendaciones aplicadas en un contexto local, aspecto que se debe tener en cuenta para realizar un juicio global sobre la utilidad de las guías. 6. Se necesitan más estudios sobre comparación de GPC sobre el deterioro de la integridad cutánea, para llegar a un consenso entre la Atención Especializada y la Atención Primaria.