Salvador Casado
Los blogs o bitácoras son páginas de Internet escritas por uno o varios autores a modo de diario o cuaderno de notas. Su diseño puede variar, pero en esencia permiten que su autor comparta contenido escrito o audiovisual de forma periódica. Sus lectores pueden suscribirse a un blog usando programas informáticos que facilitan que la información llegue a ellos, y no al revés. No hace falta que abramos todos los días nuestros diez blogs favoritos, los agregadores o lectores de noticias1 (el propio navegador, Google Reader, Netvives...) lo hacen por nosotros. Los primeros blogs aparecieron en 1994, y se empiezan a hacer populares en 2001; en 2005, surgen los primeros blogs sanitarios españoles, que se irán haciendo más numerosos en los siguientes años. El formato blog se basa en una página web autogestionada mediante un programa informático (Blogger, Wordpress, Tumblr...) que ofrece una interfaz intuitiva y fácil de usar. Un neófito puede crear un blog en quince minutos. Estas herramientas facilitan una labor que anteriormente hacían programadores informáticos. Hoy, es posible que todo el mundo tenga un blog personal, su página web pública, con un mínimo esfuerzo y de forma gratuita. En sanidad, hay tantos tipos de blogs como autores; las clasificaciones más interesantes son las de Wikisanidad2 y el blog Somos Medicina3. Por un lado, existen blogs sanitarios dirigidos a profesionales, muy útiles para la formación continuada tanto de médicos júnior como sénior. Por otro lado, hay blogs dirigidos a pacientes, donde se presenta la información...