Isabel Crehuet Rodríguez, Pilar Méndez Briso-Montiano, Teresa Mulero San José, María Bernárdez Lemus, Ángel Jiménez Maldonado, Beatriz Toribio Manrique
Uno de los problemas más frecuentes que encontramos al utilizar los catéteres venosos tunelizados como acceso vascular para hemodiálisis, es un déficit de flujo sanguíneo, teniendo que invertir las líneas del circuito para poder continuar la sesión. Los investigadores, conscientes de que así puede aumentar la recirculación y derivar en una menor calidad de la técnica, han diseñado un nuevo modelo de catéter, para evitar en lo posible la recirculación de la sangre.
Actualmente, este tipo de catéter es el que se implanta a nuestros pacientes; debido a esto y a la escasez de estudios publicados en estos nuevos catéteres sobre este tema, realizamos un estudio para calcular el porcentaje de recirculación que tienen dichos catéteres, tanto con las líneas del circuito en posición normal como en posición invertida. Calculamos este porcentaje analizando la determinación sérica de la urea, en 4 muestras de sangre, extraídas semanalmente, con las líneas del circuito de hemodiálisis en ambas posiciones y aplicamos la fórmula de recirculación:
R = (BUN A2-BUN A1/BUN A2-BUN V) x 100.
Tras los resultados obtenidos podemos concluir, que el porcentaje de recirculación de la sangre en dichos catéteres es prácticamente el mismo, tanto con las líneas del circuito en una posición como en otra, habiéndose obtenido unas cifras más que aceptables para poder conseguir hemodiálisis de buena calidad, según los parámetros que aconsejan las guías de la sociedad española de nefrología de accesos vasculares.