Jesús Ignacio González Orodea, Fernando León Vázquez
Presentamos el electrocardiograma (ECG) de una mujer de 48 años, con antecedentes de cirugía bariátrica por obesidad, sin factores de riesgo cardiovascular conocidos, que acudió por un cuadro de dolor torácico opresivo, irradiado a zona interescapular, de 2 h de evolución, con sudoración profusa, que se desencadena tras la realización de ejercicio físico. Se realizó a su llegada ECG con dolor (fig. 1). En la imagen se muestran la inversión de la onda P en las derivaciones I, II, III, aVF y de V4 a V6, sin alteraciones de la repolarización. Tras administración de dos pulverizaciones de solinitrina sublingual, se consiguió la normalización de las ondas P (fig. 2) a los 2 min, lo que coincidió con la mejoría clínica de la opresión, aunque no llegaba a desaparecer por completo. Por la persistencia clínica, se decidió el traslado al hospital de referencia con el diagnóstico de síndrome coronario agudo. A su ingreso, se realizó nuevo ECG, que mostró una onda T negativa en la cara lateral (I, aVL, V5 y V6), II es isodifásica en aVF (fig. 3). Se realizó coronariografía, con arterias coronarias epicárdicas angiográficamente normales, ventriculografía compatible con apical ballooning en la cara lateral, y una ecocardiografía, que mostró como único hallazgo hipocinesia en la cara lateral; se diagnosticó a la paciente de síndrome de tako-tsubo1. Al alta hospitalaria, el ECG se había normalizado, y la paciente se encontraba sin angina y con grado funcional I/IV (NYHA). Figura 1. Inversión de la...