A. Carro, Fernando Carro, Miguel del Valle Soto
La actividad deportiva prolongada e intensa produce adaptaciones morfológicas y funcionales en el sistema cardiovascular. La magnitud de dichos cambios está determinada por diversos factores, llegando a configurar una entidad propia: el �corazón del atleta� (CA). El aumento del número de individuos que practican deporte supone un incremento paralelo en la prevalencia de CA, pero también se eleva la proporción de afectados con enfermedades cardiacas que están asintomáticos, y que participan en competición. Nuestro trabajo revisa las características principales del CA, así como sus aspectos diferenciales con entidades patológicas. La caracterización adecuada de deportistas como CA o miocardiopatía permite establecer medidas adecuadas para la reducción de riesgo de muerte súbita relacionada con el deporte.