Objetivo: Evaluar el impacto económico, en términos de costes directos e indirectos de los accidentes de tráfico en Canarias durante el año 1997. Métodos: El enfoque que se ha utilizado es el método del coste de la enfermedad. Los costes directos e indirectos se han estimado utilizando los costes de la prevalencia, es decir, los costes que se producen durante el año 1997. Los costes directos se han desglosado en costes derivados de la asistencia sanitaria, los costes administrativos y los costes de los daños materiales a los vehículos. Los costes indirectos se obtienen a partir de unidades físicas mediante su transformación en unidades monetarias utilizando el enfoque de la teoría del capital humano. Resultados: El coste total atribuible a los accidentes de tráfico es de 39.887,16 millones de pesetas, o el equivalente a 24.470 pesetas por cada habitante en Canarias, lo que supone el 1,3% del PIB canario. El coste directo total es de 32.559,67 millones de pesetas, constituyendo el 82% del total, que se distribuye según los diferentes conceptos considerados: coste de la asistencia sanitaria, 2.407,40 millones de pesetas; costes administrativos, 13.415,89 millones de pesetas, y costes de los daños materiales de los vehículos, 16.736,38 millones de pesetas. El coste indirecto total es de 7.327,49 millones de pesetas, constituyendo el 18% del total, que se distribuye en: mortalidad anticipada, 6.884,88 millones de pesetas y bajas laborales, 442,61 millones de pesetas. Conclusiones: A pesar de haberse adoptado un enfoque conservador, dado que el estudio no incluye los costes asociados con el dolor y el sufrimiento, la invalidez permanente y la atención en el hogar por parte de los familiares, el elevado coste socioeconómico de los accidentes de tráfico indica claramente la necesidad de que las diferentes administraciones canarias desarrollen alianzas para hacer frente al problema caracterizado por el carácter preventivo de las mismas.