Francesc Cots, Xavier Castells
Desde mitad de los años noventa se ha estado hablando, en el conjunto del Estado español, de la introducción de nuevos métodos de pago a hospitales públicos que significasen una herramienta para la mejora de la eficiencia de nuestros hospitales en un marco de competencia gestionada. Los sistemas que reconocen la importancia de la actividad realizada y también del rol de los hospitales en la red de provisión pública, conocidos como sistemas mixtos, han aparecido como la herramienta más equilibrada tanto en la adjudicación del riesgo como en la dialéctica eficiencia-sostenibilidad del sistema público. En este trabajo se analiza la situación en el método implantado en Cataluña desde 1997, y se contrapone con la solución adoptada en Andalucía un año más tarde. La valoración se centra en los instrumentos utilizados para incorporar el carácter mixto en las dos situaciones. De un lado tenemos la validez limitada de los grupos relacionados por el diagnóstico (GRD) para definir el coste del producto hospitalario y el numeroso grupo de posibles ajustes necesarios a los que deben ser sometidos antes de poder ser aplicados a nuestro entorno. De otro lado tenemos la forma a través de la cual se define el nivel estructural mediante instrumentos como el grade of memberships (GOM) para el caso catalán o los centros básicos (CB) para el caso andaluz. Más adelante se analiza cómo se han introducido los diferentes métodos y cómo se han adaptado a la realidad, tanto en Cataluña como en Andalucía. Los períodos transitorios no parecen haber conducido a una solución definitiva, más bien han puesto en evidencia la fragilidad de los instrumentos utilizados y, en todo caso, del uso que se ha hecho de ellos. La conclusión es que ha habido precipitación y cierto grado de ingenuidad en la introducción de elementos que favorecieran la eficiencia de los hospitales desde los sistemas de pago. La realidad es que los métodos de pago a hospitales de una red pública bastante harán si llegan a considerarse métodos de asignación de recursos transparentes y son sostenibles en el tiempo. La eficiencia en los hospitales públicos hay que trabajarla día a día desde los propios hospitales y desde los sistemas de información que pueden llegar a generar los Sistemas Regionales de Salud, y no se conseguirá solamente mediante elementos financieros externos y claramente indirectos a la realidad asistencial.