En el momento actual, la relación entre epilepsia y alimentación se puede abordar desde una doble vertiente.
Por un lado, no cabe duda que ciertos tipos de epilepsia están relacionados con la alimentación, aunque como no se conoce si el consumo de algún alimento pudiera condicionarla, la realización de dietas restrictivas no está justificada.
Por otro, se conoce que una dieta rica en grasas y pobre en hidratos de carbono y proteínas, la dieta cetogénica (DC) tiene efecto en el control de la epilepsia refractaria.
En este capítulo se revisan ambos aspectos y en especial las condiciones para el uso de esta última, discutiéndose los diversos tipos de DC y las estrategias emprendidas para mejorar su efecto terapéutico y disminuir las complicaciones.