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Alvisa Palese, E. Cristea, M. Mesaglio, E. Stempovscaia
Objetivo: Describir el proceso de emigración de enfermeras moldavas a Italia.
Antecedentes: La República de Moldavia anteriormente una parte de la Unión Soviética, obtuvo la independencia en 1991. Actualmente, existen 25848 enfermeras (60,6 por cada 10000 habitantes), trabajando principalmente en el sistema sanitario público. Cada año, alrededor de 2000 enfermeras abandonan el país buscando mejores condiciones laborales y mejor calidad de vida.
Métodos: Se adoptó un diseño de estudio longitudinal (2006-07). En la primera fase, contactamos con todas las enfermeras conocidas viviendo en Moldavia y con sus colegas disponibles siguiendo una estrategia de bola de nieve. Los criterios de inclusión es que fueran enfermeras que habían decidido emigrar a Italia y que ya tenían preparados los documentos de emigración y/o estaban esperando su salida. En la segunda fase, entrevistamos a la misma muestra de enfermeras a su llegada a Italia.
Resultados: Tras un año, sólo 25 enfermeras de las 110 entrevistadas inicialmente (22,7%) habían llegado a Italia y ninguna trabajaba como enfermera. A cada enfermera le costó el proceso de emigración alrededor de 3278 euros y el tiempo de espera desde la decisión de salir hasta la llegada fue alrededor de 24 meses.
Conclusiones: Todas las enfermeras moldavas implicadas en este estudio, una vez llegaron a Italia, dejaron de existir desde una perspectiva oficial. Se necesitan desarrollar políticas y recomendaciones para asegurar la integración de las enfermeras educadas en Moldavia al sistema sanitario y controlar la cantidad de capital humano (en términos de pérdida de atención, fuga de cerebros y pérdida de jóvenes) que este proceso pone en riesgo de desaprovechar.
