Carmelo Iborra Moltó, Sofía López Roig , Mercedes Roca Alonso, María Ángeles Pastor-Mira
El paciente tratado con hemodiálisis se encuentra sometido a una serie de restricciones y obligaciones relacionadas con su tratamiento. Por una parte debe acudir a las sesiones de hemodiálisis y completar el tiempo diario de la sesión, que garantizan una hemodiálisis adecuada. Por otra, el tratamiento renal sustitutivo les obliga a seguir una serie de restricciones dietéticas básicas para la gran mayoría de pacientes, como son: el control de la ingesta de líquidos y de la ingesta de determinados alimentos ricos en potasio y fósforo. El cumplimiento de estas restricciones es un factor fundamental, relacionado directamente con el riesgo de morbimortalidad. Además de las restricciones dietéticas, los pacientes se ven sometidos a un tratamiento farmacológico que les obliga a veces a tomar de 15 a 20 fármacos diarios. En ocasiones los pacientes incumplen las recomendaciones dietéticas, especialmente la ingesta de líquidos interdiálisis, de hecho es uno de los indicadores de adhesión más utilizados en los estudios sobre el tema. En menor medida incumplen el tratamiento farmacológico, que en la gran mayoría de los casos es debido a olvido, a confusión o a malinterpretación de las pautas médicas. Con frecuencia los estudios sobre adhesión muestran la falta de un criterio estándar para poder establecer las proporciones de incumplidores y la necesidad de unificar estos criterios.