Fundamentos: En España no existe ningún estudio en el que se hayan tomado muestras representativas por Comunidades Autónomas (CCAA) para estudiar la morbilidad psíquica. Los objetivos de este trabajo son describir su prevalencia, la presencia de diagnóstico, el consumo de psicofármacos, el apoyo social y la salud autopercibida y la relación entre la morbilidad psíquica y el resto de variables, tanto a nivel nacional como de CCAA.
Método: Estudio transversal. Fuente de información: Encuesta Nacional de Salud 2006, muestra 29.478 personas. Variables estudiadas:
sociodemográficas, morbilidad psíquica (GHQ-12), estado de salud autopercibido, diagnóstico de trastorno mental, apoyo social funcional (Duke) y consumo y prescripción de psicofármacos.
Para determinar la frecuencia se utilizó el porcentaje y los intervalos de confianza al 95%. Para estudiar la relación entre morbilidad psíquica y el resto de variables se utilizó la prueba de Chi cuadrado, considerando la significación estadística con un valor de p<0,05.
Resultados: La prevalencia de morbilidad psíquica fue del 20,1%, siendo la CA más alta la de las Islas Canarias (28,2%) y La Rioja la más baja (12,2%). El 62,4% de las personas con morbilidad psíquica nunca había recibido un diagnóstico y el 71,6% no había consumido psicofármacos en los últimos 12 meses. La Rioja fue la CA con un mayor porcentaje de casos no diagnosticados (81,8%) y no tratados con psicofármacos (83,1%), mientras que en el Principado de Asturias estos porcentajes fueron los más bajos. El 8,1% de las personas con morbilidad psíquica tenían bajo apoyo social y el 63,8% afirmaban tener mala salud.
Conclusiones: La morbilidad psíquica es un fenómeno prevalente y más de la mitad de las personas que la sufren no reciben diagnóstico ni tratamiento farmacológico, existiendo importantes variaciones entre las CCAA.