Objetivo: Al principio de conocerse la infección por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), la causa más importante de su transmisión en las mujeres occidentales fue el consumo de drogas por vía parenteral. El objetivo de nuestro trabajo consistió en describir las principales características sociales y clínicas de un grupo de madres seropositivas, y en analizar su relación potencial con el uso intravenoso de drogas. Métodos: Realizamos un estudio observacional prospectivo con 220 mujeres infectadas por VIH que presentaban la particularidad de haber dado a luz niños con riesgo de infección. Se incluyeron todas las madres reclutadas en la Unidad VIH de un hospital de Valencia que tuviesen definido el diagnóstico de su infección durante el período de estudio comprendido entre el primer caso materno conocido en 1985 y 1993. El análisis de los datos se basó en un análisis univariado. Resultados: La transmisión del virus se produjo por mantener relaciones heterosexuales en un 27,7% de las mujeres estudiadas, y a través de la drogadicción parenteral en el 69,1%. Se detectó mayor número de madres que abortaron, con antecedentes penales y abandono domiciliario entre las usuarias de drogas por vía parenteral (UDVP), con odds ratio (OR) de 1,8 (p = 0,087), 8,95 (p = 0,012) y 15 (p = 0,000), al compararlas con las madres no UDVP. Además las UDVP presentaron mayor probabilidad de contraer la infección por hepatitis B o C (OR = 7,06, p = 0,000) y de tener asociados otros hábitos tóxicos como tabaquismo (OR = 6,19, p = 0,000) y alcoholismo (OR = 5,91, p = 0,117). Conclusiones: Muchas de las características analizadas en estas mujeres estaban más relacionadas con el consumo de droga inyectada que con la infección por VIH, tales como la mayor frecuencia de abortos electivos, antecedentes penales, abandono domiciliario, politoxicomanías y antecedentes patológicos como hepatitis B o C.