Manuel Morán Rodríguez
Introducción y objetivos: Estimar la prevalencia y duración de la lactancia materna (LM). Describir la evolución del peso en el primer año de vida y la demanda de consultas al pediatra en relación al tipo de lactancia.
Pacientes y métodos: Estudio transversal. Datos retrospectivos.
Se recogió una muestra aleatoria de historias clínicas de niños nacidos entre 2000 y 2005. Se estimó la prevalencia de lactancia natural al inicio, a los tres y seis meses. Se elaboró un índice de deserción para la duración.
Se comparó el peso medio y el número de consultas al pediatra con el tipo de lactancia.
Resultados: Iniciaron la lactancia materna exclusiva (LME) un 63,5 % (IC 95%: 58,6-64,5). A los seis meses permanecen un 22,6 % (IC 95%: 18,4-26,9). Un 80,5% (IC 95%: 75,4-84,6) comienzan lactancia materna total �exclusiva o mixta� (LMT). El 43,4 % de los niños que empezaron con LME abandonaron a los tres meses y el 64,4% a los seis; mientras que los de LMT tienen índices de deserción menores, un 26,5% y un 54,4% a los tres y a los seis meses, respectivamente. Los niños con lactancia materna mixta (LMM) suelen tener un peso medio mayor. Los alimentados con la LME hasta los seis meses, consultan al pediatra, un promedio de 4,5 veces durante el primer año. Los de lactancia artificial en unas 6,5 ocasiones.
Ambas medias son significativas estadísticamente (p < 0,007).
Conclusiones: La lactancia materna en esta población se aparta de las recomendaciones de la OMS. Los resultados apuntan a que la LME conlleva una evolución del peso del niño más adecuada y una menor morbilidad, al menos en el primer año de vida.