Carmen Cabezas Peña
De acuerdo con los más recientes datos estadísticos sabemos que el 36% de la población general española mayor de 16 años de edad es consumidora habitual de tabaco y que el 70% de los fumadores visita, al menos una vez al año, a su médico de familia1,2. Además, conocemos que el tabaquismo representa la primera causa evitable de muerte en nuestro país y que se ha calculado que cada año mueren 56.000 españoles por enfermedades directamente relacionadas con el consumo de tabaco3. Estos datos deben alertar a todos los profesionales sanitarios para que durante su práctica asistencial desarrollen intervenciones sobre el tabaquismo. Cualquier tipo de intervención terapéutica que los médicos realicen sobre el tabaquismo de sus pacientes es eficaz; ahora bien, cuando la intervención se adecua a las características individuales de cada fumador, su eficacia y eficiencia aumentan