La historiografía tradicional suele marginar algunas clases sociales, así como algunos sectores profesionales aunque estos hayan tenido una labor trascendencia en la trayectoria de la humanidad. Pocas son las páginas que ha producido la investigación sobre la esclavitud, a pesar de su importancia directa sobre la economía, la política y la cultura en América, África y Europa. Este artículo pretende hallar el punto de encuentro entre la historia de la enfermería y la de la esclavitud, -históricamente han sido sectores apartados de las Ciencias Sociales- es decir, el objetivo es reconstruir cómo era la asistencia sanitaria de la población esclava en Lima en el primer tercio del siglo XVIII, y sobre todo, quién era el responsable de estos cuidados. Para ello partimos de la siguiente hipótesis: la condición de los esclavos impedía que la mayoría de las veces recibieran la visita del médico, por lo que las únicas responsables de sus cuidados fueron las/os enfermeras/os movidas por la caridad cristiana o por el interés del propietario del esclavo. De este modo se establece un directo paralelismo entre la clase social marginada, los esclavos y una profesión, la de las enfermeras.
Traditional historiography often marginates some social classes just as it marginates certain professional sectors, even if they have represented a paramount landmark in the evolution of mankind. Seldom has research ventured into the history of slavery although it has had great importance upon the economy, politics and culture of America, Africa and Europe. This article aims to find a meeting point between Nursing History and Slavery History, both marginalized from social sciences. We attempt to reconstruct here the system for the provision of sanitary care to the enslaved Lima population in the first half of the 18th century, and above all,examine who was responsible for such care. Our hypothesis is that, only nurses either moved by feelings of Christian charity or by the slaves owners' own interests, were the health care providers at the time, as doctors were prevented from helping such a population. In this way, a direct parallelism between a marginalized social class: the slaves, and a profession: nursing, is established.