La seguridad de los pacientes es una dimensión de calidad de la atención sanitaria. Es un tema que preocupa desde hace mucho tiempo, sin embargo en la última década, diversos estudios realizados han revelado el gran impacto en la morbimortalidad de los eventos adversos. Estos resultados, sumados a la creciente participación de los ciudadanos, han posicionado el tema de la seguridad de los pacientes en un lugar prioritario de la política sanitaria (1).
La innovación que supone el concepto se Seguridad Clínica del Paciente (SCP), radica en el cambio de enfoque del planteamiento de los errores, pasando de un modelo centrado en la persona a un modelo centrado en el sistema, y se basa en la premisa �errar es de humanos� (2).
El fomento de la cultura de la SCP entre gestores y profesionales sanitarios de las instituciones u organizaciones sanitarias, y el trabajo en conjunto de ambos, permite llegar al conocimiento sobre los riesgos presentes en las organizaciones, y el rediseño de los procedimientos susceptibles de error, mejorando así las condiciones de trabajo de las personas, llegando con ello a actos clínicos más seguros (2).
Es por ello que, mejorar la SCP mediante el fomento de la Cultura de la Seguridad de los Pacientes es una de las estrategias contempladas en el Plan de Calidad para el Sistema Nacional de Salud de marzo de 2006 (3).
En este artículo nos proponemos cubrir los siguientes objetivos: a) fomentar la cultura de la Seguridad del Paciente en atención prehospitalaria; b) abordar el proceso de administración de medicamentos en las UVI-móviles de desde la perspectiva de estudio de la Seguridad Clínica del Paciente; y c) identificar riesgos para la Seguridad Clínica del Paciente, en relación con la administración de medicamentos.