Antecedentes: La carga que representan los problemas relacionados con el alcohol en Europa Central y Oriental es la más alta del mundo. El nivel de consumo de alcohol en Bielorrusia se encuentra entre los más altos a nivel mundial, con un índice de consumo estimado de 14 litros de alcohol puro per cápita. Los desórdenes sociales, económicos y políticos experimentados en Bielorrusia durante los años que siguieron a la disolución de la Unión Soviética se han visto acompañados por un incremento sustancial de la mortalidad por todas las causas. Aunque el alcohol, en las antiguas Repúblicas Soviéticas, parece ser un contribuidor importante en la carga sobre dichas enfermedades, se han llevado a cabo pocas investigaciones sistemáticas sobre su impacto en la mortalidad por todas las causas en Bielorrusia. Objetivos: El objetivo del presente estudio es tratar este déficit particular en lo concerniente a la relación con la mortalidad total por alcohol utilizando datos a nivel agregado. Método: Las tendencias en la mortalidad por todas las causas y los índices de incidencia de la psicosis etílica (como sustituto del consumo de alcohol), desde 1970 hasta 2005, fueron examinados utilizando análisis de series temporales ARIMA para evaluar relaciones bivariables entre dos series temporales. Resultados: Los resultados del análisis de estas series temporales apuntan hacia una estrecha relación entre la mortalidad por todas las causas y los índices de psicosis etílica a nivel agregado. Conclusiones: Este estudio refrenda los hallazgos anteriores que sugieren la existencia de vínculos estrechos entre alcohol y mortalidad. Las conclusiones del presente estudio también apoyan la hipótesis de que el alcohol es un factor crucial en la crisis de mortalidad de Bielorrusia. Por lo tanto, el control del alcohol debe ser una prioridad clave en las políticas bielorrusas de salud pública.