J. Castellanos, G. Castaldini, P. Fillat
Revisamos retrospectivamente una serie de 19 fracturas intrarticulares de meseta tibial (correspondiendo 3 casos al tipo B1, 5 casos al tipo B2.1, 4 al tipo 62.2, 5 al tipo B3.1 y 2 al B3.3 de la clasificación AO/ ASIF) con un seguimiento de 28 meses de media (de 6 a 94 meses), con el propósito de demostrarla utilidad del manejo artroscópico y fijación percutánea con tornillos de esponjosa de estas fracturas. El resultado funcional al último control según el escore de Rasmussen fue de una media de 28 puntos (máximo 30 puntos), correspondiendo a 16 resultados excelentes y 3 buenos. Concluyendo que la artroscopia presenta una gran utilidad en el manejo de estas fracturas, permitiendo una exacta identificación de la extensión del daño articular y de las lesiones de tejidos blandos asociados, además de permitirla evacuación del hemartros y de cuerpos libres así como la reparación de las lesiones asociadas (7 lesiones meniscales en nuestra serie), evaluar y ayudar a la reducción exacta de los fragmentos deprimidos. Al evitar amplias exposiciones logramos una más pronta recuperación con menos dolor y un mayor balance articular final.