Introducción. Los Enfermeros(as) están expuestos a un riesgo infeccioso que puede ser minimizado con la aplicación de las precauciones universales que parten de la premisa de que la sangre y los líquidos corporales deben considerarse siempre potencialmente contaminados. En este estudio se explora cómo el personal de enfermería pone en práctica estas maniobras y usan las barreras descritas para la protección ante la actuación de enfermería y la realización de procederes.
Métodos. El estudio tuvo lugar en el Hospital Universitario Dr. "Gustavo Aldereguía Lima", de Cienfuegos (Cuba) en el período comprendido entre Enero a Diciembre del 2006. De un universo de 575 enfermeros (licenciados y técnicos); se trabajó con una muestra aleatoria del 40 % estratificada entre las 4 Áreas del Hospital: Quirúrgica, Clínica, Urgencia y Materno Infantil. Para la recolección de datos se aplicaron guías de observación valorando la realización de procederes de enfermería y el uso correcto de las barreras descritas en las buenas prácticas de enfermería.
Resultados: Un total 177 enfermeros (77.2 %) cumplieron con las precauciones universales de la bioseguridad usando correctamente las barreras diseñadas para cada proceder. los procedimientos en los que los licenciados utilizan correctamente medidas de barrera son los cuidados hemodinámicas, cateterismo y manipulación del recién nacidos; mientras que los técnicos las usan de forma correcta en: cateterismo, alimentación e higiene de la piel. la capacitación de postgrado en bioseguridad hospitalaria es alta entre los enfermeros del hospital estudiado, de forma que 83 licenciados (72.8%) y 79 técnicos (60.8%) cuentan con esta capacitación. Esta capacitación está directamente asociada con el cumplimiento de las precauciones universales (p<0.0001). De todo lo anterior se tradujo que la percepción del riesgo no solo varía de una persona a otra y de un profesional a un técnico de la misma especialidad, sino también dependiendo del servicio, área en que trabaja y el tipo de patología que se atiende. Todo ello se resume en falta de comprensión clara del concepto de precaución universal y de la necesidad de concienciar el riesgo a que se expone el personal de salud al realizar las maniobras con los pacientes,