Los aficionados a la naturaleza como aquellos que tienen el campo como medio habitual de trabajo, se exponen al riesgo de ser infectados por una garrapata, que puede actuar como vehículo transmisor al hombre de diversas zoonosis. En España se registra un aumento de incidencia de estas enfermedades debido al cambio de las condiciones climáticas y al aumento de la población de animales de compañía.
En este artículo se revisan la etiología y las manifestaciones de cuatro enfermedades transmitidas por picadura de garrapata con incidencia en nuestra área geográfica: fiebre botonosa o exantemática mediterránea, borreliosis de Lyme, fiebre Q y tularemia.
Asimismo, se describen las medidas de prevención y la actuación una vez que se ha producido la picadura y se resalta la importancia de la educación sanitaria de la población sobre este problema de salud.