Mª L. Pita Martín de Portela
Objetivos: Evitar tanto las complicaciones por deficiencia de zinc y de cobre como los efectos adversos del exceso en pacientes graves que requirieron nutricion parenteral, estudiando la relacion entre las cantidades de zinc y de cobre administradas en las mezclas de nutricion parenteral y los cambios en algunos indicadores bioquimicos de los pacientes, con respecto a zinc y cobre.
Pacientes y metodologia: 29 pacientes graves, adultos, con pancreatitis o sometidos a cirugia mayor abdominal. Se determino, al inicio y al final del tratamiento (5-21 dias):
cobre y zinc en las mezclas de nutricion parenteral administradas y en eritrocitos (GR), zinc en plasma y cobre en suero (Espectrometria de Absorcion Atomica).
Resultados (promedio �} DE, rangos: entre parentesis):
los valores de zinc y cobre en las mezclas de nutricion parenteral fueron (�Êg/mL): zinc: 4,2 �} 1,7 (1,8 a 9,3);
cobre: 0,94 �} 0,66 (0,1 a 3,1); zinc plasmatico (�Êg/dl): inicio 80 �} 45 (29-205); final: 122 �} 56 (37-229); zinc eritrocitario (�Êg/dl): inicio: 2.300 �} 1.070 (790.5280); final: 2.160 �} 920 (790-4.440); cobre serico (�Êg/dl): inicio: 124 �} 35 (62-211); final: 128 �} 41 (60-238); cobre eritrocitario (�Êg/dl): inicio: 72 �} 39 (4-183); final: 70 �} 41 (9-156). Los cambios porcentuales de los niveles de zinc eritrocitario correlacionaron con el zinc (mg/d) en las mezclas de nutricion parenteral (r = 0,38). Las variaciones de cobre serico y eritrocitario correlacionaron positivamente con los valores de cobre administrado (mg/d) en las mezclas de nutricion parenteral (r = 0,31 y 0,26, respectivamente).
Conclusiones: Estos resultados evidenciaron que: 1) las determinaciones de zinc eritrocitario, cobre serico o eritrocitario serian de utilidad para controlar los niveles de zinc y de cobre administrados en las mezclas de nutrición parenteral a los pacientes graves; 2) las dosis de zinc deberían ser menores a 8,1 mg/d, y 3) no sería aconsejable administrar dosis de cobre superiores a 1,2 mg/d.