Joaquín Carballido Rodríguez, José Luis Tisaire, Nuria Perulero
Fundamento y objetivo: Aunque está extendido el uso del bloqueo androgénico en el cáncer de próstata avanzado (CPA), se ha estudiado poco la repercusión de un efecto secundario frecuente de este tratamiento: los sofocos. Se pretende diseñar y validar un cuestionario específico para evaluar el impacto de los sofocos en pacientes con CPA en tratamiento hormonal ablativo. Pacientes y método: Se ha realizado un estudio observacional, prospectivo y multicéntrico, de 9 meses de duración, de 496 pacientes con CPA, divididos en 2 grupos: A (de fiabilidad), formado por 56 pacientes en los que no se preveían cambios significativos en el estado de salud, y B (de sensibilidad), constituido por 440 pacientes que recibían por primera vez tratamiento hormonal o en los que éste se modificaba por intolerancia o progresión de la enfermedad. Se administró el Cuestionario de Sofocos (19 ítems) y el Rotterdam Symptoms Checklist (RSCL), y se recogieron variables como el estadio de la enfermedad, antígeno prostático específico e índice Karnofsky. Resultados: La tasa de respuesta al cuestionario fue del 85,5%. Las correlaciones observadas entre los distintos ítems fueron altas, oscilando entre 0,545 y 0,957. El tamaño del efecto entre la visita inicial y las de seguimiento fue de 0,34; 0,41, y 0,53 a los 3, 6, y 9 meses, respectivamente. A los 3 meses, los pacientes con progresión mostraron una reducción media (desviación estándar) del impacto de los sofocos sobre la vida diaria de 35,76 (37,05). La consistencia interna, medida por el alfa de Cronbach, fue de 0,98. La fiabilidad test-retest, determinada por el coeficiente de correlación intraclase, resultó significativa (0,84; intervalo de confianza del 95%, 0,69-0,91). Conclusiones: El Cuestionario de Sofocos muestra buenos resultados en factibilidad, validez, fiabilidad y sensibilidad al cambio. Es el primero en evaluar el impacto de los sofocos en el paciente con CPA, y sus buenas propiedades de medición lo hacen apto para su utilización tanto en la práctica clínica como en investigación