Entre los adolescentes el consumo de alcohol y otras drogas está frecuentemente vinculado al contexto recreativo nocturno, al igual que la búsqueda y experimentación en sexualidad. Cada una de las sustancias tiene efectos en el comportamiento, en la experiencia sexual y en las consecuencias. Aquí se explora cómo experimentan los adolescentes españoles la relación y el rol que ocupan las drogas en la experimentación de la sexualidad en estos contextos recreativos. Se ha utilizado metodología cualitativa para explorar la relación entre sexualidad y drogas en 100 jóvenes de ambos sexos de 4 ciudades españolas, que les gustase salir los fines de semana y con experiencia sexual. Se les localiza mediante el sistema de bola de nieve y se les hace entrevistas en profundidad. Los resultados confirman la importancia que adquiere el contexto recreativo nocturno en la búsqueda y experiencia sexual entre los jóvenes. Los jóvenes tienen una idea muy precisa de cómo cada una de ellas funciona en relación con distintas prácticas sexuales. El alcohol es con mucho la más popular y la que tiene más ventajas en las cuatro prácticas sexuales analizadas (facilitar el encuentro sexual, involucrarse en experiencias más arriesgadas, aumentar la excitación y prolongar la relación sexual), excepto para prolongar la relación que se prefiere la cocaína. El cannabis no gusta porque relaja y no hay interés en el éxtasis por sus efectos sobre la sexualidad. A las mujeres les gusta mucho el alcohol para experiencias arriesgadas, aumentar sensaciones y prolongar sexo y utilizarían menos cocaína.