M. Carrión Torre, E. Zubizarreta Iriarte, M.M. Sarasa Monreal
Introducción. La orden de no resucitación es una medida referida estrictamente a la no realización de maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP), sin embargo se observa que habitualmente implica modificaciones en el tratamiento. Objetivos. Analizar el efecto que tiene la orden de no RCP en el plan de atención al paciente crítico y analizar si existen diferencias en la carga de trabajo de enfermería (Nine Equivalents of Nursing Manpower Use Score [NEMS]) antes y después de la orden de no RCP. Método. Este estudio descriptivo analizó el plan de atención de 50 pacientes críticos antes y después de la orden electrónica de no RCP. Resultados. Las variaciones encontradas después de la firma de la orden de no RCP fueron la retirada de tratamientos en 30 pacientes, la instauración en 6, en 12 tanto se retiraron como se iniciaron tratamientos y en 2 no hubo cambios. Se encontraron modificaciones en el soporte ventilatorio, en la administración de fármacos vasoactivos y en la depuración extrarrenal. Soporte ventilatorio: a 7 pacientes se les retiró la ventilación invasiva, a 3 la ventilación no invasiva y a 15 se les disminuyó la fracción inspiratoria de oxígeno del respirador el día del exitus. Fármacos vasoactivos: en 10 pacientes se retiró el tratamiento vasoconstrictor y en uno se instauró, los inotrópicos se retiraron en 3 pacientes y se instauraron en 2. Depuración extrarrenal: en 4 pacientes se retiró y en 2 se inició. La puntuación NEMS disminuyó después de la orden (36,20-34,62; p = 0,030). Conclusiones. La orden de no RCP tiene un efecto en el plan de atención al paciente crítico. Por otro lado, aunque la puntuación NEMS disminuye ligeramente después de la firma, la carga de trabajo de enfermería se mantiene al incrementarse la atención psicosocial al paciente y a la familia.