La fascia es un conjunto de membranas de tejido conjuntivo fibroso que envuelve los órganos del cuerpo de forma tridimensional. Es un tejido continuo, ininterrumpido.
Las funciones de la fascia son múltiples e indispensables para un correcto funcionamiento del cuerpo.
La alteración de la fascia, sistema miofascial, puede producirse por mecanismos directos, posturas viciosas e inmovilizaciones mantenidas.
Las técnicas de liberación miofascial pretenden restablecer la funcionalidad del sistema mediante la aplicación de movimientos o presiones mantenidas tridimensionales, aplicadas con las manos del fisioterapeuta.
Se debe propiciar un ambiente adecuado para realizar este tratamiento y hacer unas recomendaciones al paciente para los días sucesivos al tratamiento.
Es necesaria una valoración previa del paciente para descartar patologías en las que la aplicación de técnicas sobre el sistema miofascial pueda estar contraindicado.
Estas técnicas pueden complementarse con otras técnicas fisioterápicas, técnicas de terapia manual u otros tratamientos que permitan potenciar los beneficios del tratamiento, como en el caso de la fascitis plantar.