Tanto la complejidad histopatológica renal asociada al desarrollo del lupus eritematoso sistémico como la traducción clínica derivada de aquélla siguen representando un reto diagnóstico con implicaciones terapéuticas, a las que cada vez se ofrece un mayor número de opciones dentro del campo de la inmunodepresión. Los nuevos hallazgos obtenidos por la investigación intentan arrojar nueva luz sobre la interpretación de la biopsia renal, su correlación con el espectro clínico atribuido y su pronóstico, y sobre los nuevos tratamientos de la nefropatía lúpica, algunos de los cuales se encuentran actualmente en fases intermedias de ensayo clínico y ofrecen resultados esperanzadores. La nefropatía lúpica membranosa, reconocida como entidad anatomopatológica hace ya más de 40 años, representa a su vez una especificidad morfológica en el conjunto del material histológico acumulado y un enigma todavía en muchos aspectos de su etiopatogenia.