Sara Bastida Codina, Francisco José Sánchez-Muniz, R. Cuena Boy, Angel Aragonés, María del Carmen Bravo Llatas
FUNDAMENTO Y OBJETIVO: Estudiar la influencia de la dieta, de los parámetros antropométricos y de las características lipoproteínicas al nacimiento y de los padres sobre la concentración de lipoproteínas a los 4 años de edad.
SUJETOS Y MÉTODO: Se seleccionó para participar en un estudio de seguimiento a los 4 años a 18 niños con un perfil lipoproteico normal al nacer (grupo 1), a otros 19 con concentraciones elevadas de colesterol total (CT) al nacer (grupo 2) y a 21 con CT normal pero valores anormales al nacer de triglicéridos, apolipoproteínas, lipoproteínas y cocientes lipoproteínicos (grupo 3).
Se evaluaron el peso corporal, el índice de masa corporal (IMC) y la adecuación de la dieta a los 4 años desde el punto de vista cardiovascular. Se realizó un análisis de regresión lineal múltiple por pasos para explicar la concentración a los 4 años, considerando la dieta, el IMC y los parámetros lipoproteínicos de ambos padres y de los recién nacidos.
RESULTADOS: A los 4 años un gran porcentaje de niños tenía concentraciones elevadas de colesterol unido a lipoproteínas de baja densidad (cLDL), cifras bajas de colesterol unido a lipoproteínas de alta densidad (cHDL) y una dieta incorrecta, rica en colesterol y ácidos grasos saturados.
La prevalencia de concentraciones lipoproteínicas alteradas fue similar en los 3 grupos, excepto para el cociente CT/cHDL. Las correlaciones entre las variables al nacimiento y a los 4 años fueron todas significativas (p = 0,021-0,0001), salvo para los triglicéridos, el CT y el cLDL. En el grupo 3 se perdía la significación en todas las variables. En las regresiones múltiples las variables maternas, paternas y de los recién nacidos aparecieron como variables explicativas en un gran número de modelos. Las concentraciones maternas fueron más explicativas que las paternas y las de los neonatos. Los modelos más explicativos fueron para CT/cHDL y cLDL/cHDL (ambos, R2 > 0,578; p < 0,0001).
CONCLUSIONES: A los 4 años, las variables lipoproteínicas, más que el IMC o la dieta, se asocian a los valores lipoproteínicos de los progenitores y los de los niños al nacer.