La espina bífida supone una malformación congénita del tubo neural. Se ha efectuado un plan de cuidados a una niña de 12 años con esta enfermedad en un colegio de educación especial. Utilizando los patrones de Gordon se ha valorado a la paciente y se han identificado los diagnósticos enfermeros: desequilibrio nutricional por exceso, incontinencia urinaria de esfuerzo, deterioro de la habilidad para la traslación, riesgo de infección, riesgo de deterioro de la integridad cutánea, riesgo de respuesta alérgica al látex, disposición para mejorar la eliminación urinaria y disposición para mejorar el autoconcepto. Cada diagnóstico se ha individualizado, identificándose sus factores relacionados o de riesgo y características definitorias, según corresponda. Del mismo modo, se han establecido los resultados NOC (Nursing Outcomes Classification) y las intervenciones NIC ( Nursing Intervention Classification) con descriptores y actividades, respectivamente. La utilización del proceso enfermero mejorará la atención de los pacientes y el trabajo en equipo.