La edad supone a veces el único criterio de selección para la admisión de los ancianos en unidades de cuidados intensivos (UCI) debido al gran consumo de recursos de un segmento de edad con expectativa de vida acortada. En este estudio se evalúa la idoneidad del ingreso de 80 pacientes mayores de 84 años (edad media, 87) ingresados durante 5 años en una UCI por diversas enfermedades. Durante el período de estudio falleció un 21,3%. Los pacientes fallecidos tenían una estancia inferior, mayor puntuación APACHE II y mayor proporción de afecciones cardíacas que el resto (p < 0,05) y, además, precisaron con mayor frecuencia ventilación mecánica. Las características clínicas del segmento de edad más joven (65-84 años) no indica que los más ancianos no tengan que ser ingresados en UCI en relación con su gravedad. La edad no se mostró como variable asociada a mortalidad o peor pronóstico en ancianos; el diagnóstico, las posibilidades terapéuticas y la recuperación del estado basal de salud fueron las indicaciones básicas de su admisión.