Salamanca, España
En los últimos años se ha avanzado de forma notable en el conocimiento de las alteraciones genéticas presentes en los meningiomas y su asociación con la ontogenia y progresión tumoral. Así, mientras que la presencia de monosomía 22/22q, asociada a mutación en los genes NF2, BAM22, RRP22, GAR22, MN1, SMARCB1, CLH22 y LARGE, se asocia con el proceso de transformación neoplásica, la monosomía 14, deleciones 1p, alteraciones en los cromosomas 9p, 10q y 17q y los cariotipos complejos constituirían habitualmente alteraciones genéticas asociadas con la progresión tumoral. Desde el punto de vista pronóstico, la información disponible sobre el valor de las anomalías genéticas sigue siendo escasa; no obstante, la presencia de ganancias del cromosoma 22 en el contexto de un cariotipo complejo, así como la deleción del cromosoma 1p y la monosomía 14, se ha asociado con una supervivencia libre de recaída significativamente más corta, y esta última alteración ha mostrado un valor pronóstico independiente.