La Valoración Geriátrica fue identificada como la nueva tecnología de la medicina geriátrica en la Conferencia del Consenso celebrada en 1987 en el Instituto Nacional de Envejecimiento de Estados Unidos, por Epstein. Y tiene como resultados una mejor exactitud diagnóstica, mejor uso de los servicios sociales comunitarios y mejoría del estado emocional y de la sensación de bienestar, entre otros. La coordinación socio-sanitaria debe conseguir un sistema de atención integral, interdisciplinar, con objetivos preventivos, curativos, paliativos y de rehabilitación que incluyan los del propio usuario. A pesar de que hayan proliferado escalas de valoración, es notorio el vacío teórico en lo referente a la situación social de las personas.