Jaume Canet Capeta , Carmen-Vicenta Gomar Sancho, Jorge Castillo Monsegur, Antonio Villalonga Morales, Sergi Sabaté Tenas, Carles Hervás Puyal
El estudio ANESCAT 2003 ha proporcionado datos fiables de toda la actividad de la especialidad de anestesiología en una comunidad de 6,7 millones de habitantes y, a falta de información oficial, permite prever y planificar las necesidades de anestesia y la organización de la especialidad. Ha permitido conocer que en Cataluña (España), en 2003, recibieron anestesia 9 de cada 100 habitantes, con un alto porcentaje de pacientes mayores y de alto riesgo y una alta frecuencia de anestesia en obstetricia y áreas no quirúrgicas. Se ha obtenido información inédita sobre las características de la actividad quirúrgica y, por tanto, se convierte en una herramienta para la planificación sanitaria. La previsión del aumento de la población y de su progresivo envejecimiento anuncia unos incrementos de la demanda de anestesia del 12 y el 20% en los años 2008 y 2013, respectivamente, aunque medidas bruscas de política sanitaria pueden aumentar la demanda de forma imprevisible. A esto hay que añadir el crecimiento de la demanda de otras áreas de la especialidad ligadas a la medicina perioperatoria, los cuidados críticos y el tratamiento del dolor. El ámbito de desarrollo de la anestesiología supera en un 30% la anestesia quirúrgica y se caracteriza por una gran variedad de actuaciones, con diferencias notables en complejidad, que exigen una reorganización de los recursos humanos, de equipamiento y de los programas de formación de especialistas. La densidad de anestesiólogos encontrada, de 12,7 por 100.000 habitantes, está asociada actualmente a un déficit de estos profesionales, déficit que, dada la pirámide de edades y el número actual de residentes, es previsible que perdure en los próximos 5 años, con una crisis grave de recursos humanos en un plazo de 10 años. La encuesta ANESCAT 2003 demuestra la capacidad de una sociedad científica y sus profesionales para analizar la asistencia sanitaria que les corresponde y prevenir los efectos de los cambios esperables.