La necrólisis epidérmica tóxica (NET) es una enfermedad exfoliativa de la piel que se asocia a una elevada mortalidad. Su fisiopatología es semejante a la de las quemaduras dérmicas superficiales extensas. El tratamiento y cuidado óptimo se lleva a cabo en unidades de grandes quemados, con especial atención a la resucitación con fluidos, soporte ventilatorio, identificación precoz de la sepsis e inmunosupresión con ciclosporina A. El abordaje de estos enfermos es multidisciplinar, y el papel de enfermería tiene una importancia fundamental en la identificación de signos de hipovolemia, vigilancia de la vía respiratoria, detección precoz de signos de infección e identificación de signos de dolor. Entre las medidas específicas de cuidados de enfermos con NET se encuentran los cuidados cutaneomucosos, para evitar secuelas invalidantes como la ceguera. Los cuidados de enfermería especializados contribuyen a aumentar el índice de supervivencia y a disminuir la incidencia de secuelas en estos enfermos.