Hypericum perforatum o hierba de San Juan se utilizó incialmente como antiinflamatorio (AI) en afecciones dérmicas. En la actualidad tiene múltiples usos (antidepresivo, tratamiento del insomnio, ansiolítico, antiinflamatorio, etc.), no todos oficialmente aceptados.
Respecto a la eficacia, existen ensayos clínicos publicados en los que se evidencia la superioridad frente a placebo de algunos extractos de hypericum en el tratamiento a corto plazo de la depresión leve a moderada. Otros ensayos también demuestran la no inferioridad de estos extractos frente a comparadores activos, aunque en otros no puede concluirse sobre dicha superioridad.
Los tratamientos actualmente disponibles para el tratamiento de la depresión presentan algunas limitaciones, no sólo en lo relativo a su eficacia sino en lo relacionado con su perfil de seguridad, el cual no siempre es bien aceptado. El problema fundamental del hypericum son sus múltiples interacciones farmacológicas. La Agencia Europea de Evaluación de Medicamentos (EMEA) recomienda evitar el uso concomitante de hypericum junto con antirretrovirales (inhibidores de la proteasa), digoxina, warfarina, ciclosporina, anticonceptivos orales y teofilina.