M.L. Marenco de la Fuente
Las maniobras b�sicas de control de la v�a a�rea (VA), han de ser seguidas de forma sistem�tica por todos los implicados en la asistencia de los pacientes con compromiso de la misma. La evaluaci�n de la VA y el diagn�stico de obstrucci�n son el ABC de la reanimaci�n en los traumatizados. La inducci�n de secuencia r�pida (ISR) se debe utilizar cuando est� indicada anestesia general con factores de riesgo de aspiraci�n traqueal, intubaci�n traqueal en el medio extrahospitalario y �rea de urgencias del hospital; en estas �ltimas son subsidiarios de la ISR: paciente traumatizado, traumatismo cr�neo-encef�lico, bajo nivel de consciencia, traumatismo m�xilo-facial y espinal cervical. Las m�ltiples indicaciones determinan varios modelos de ISR. Los f�rmacos y su pauta est�n determinados por el riesgo de aspiraci�n y la intubaci�n y por la especificidad de cada caso. Existe, adem�s, un tercer factor que debe ser tenido en cuenta en cada caso: posibilidad de v�a a�rea dif�cil imprevista, que constituye un riesgo de complicaci�n severa de la ISR y condiciona la selecci�n de los f�rmacos y las pautas de administraci�n. La correcta preoxigenaci�n de los pacientes tanto en la v�a �rea de emergencias como en anestesia han de considerarse obligatorias para todos los pacientes. La preoxigenaci�n debe realizarse de manera rutinaria antes de la anestesia general con apnea inducida para el manejo de la VA. Es mandatoria en pacientes con predicci�n de VAD y/o de CRF disminuidos: ni�os, ancianos, gestantes, obesos, etc.