Objetivo: evidenciar el significativo incremento de la incidencia de miastenia gravis (MG) en la población anciana, así como conocer las particularidades del manejo de esta enfermedad en esos pacientes.
Metodología: análisis retrospectivo de los casos de MG en pacientes mayores de 65 años atendidos en el hospital comarcal de la Merced de Osuna, Sevilla, durante los años 1995 a 2003.
Resultados: obtuvimos una serie de 9 pacientes (5 varones y 4 mujeres) con una edad media de 77,6 (± 8,6) años y edad media de inicio de 68,1 (± 13,8) años. El tiempo medio de evolución era de 9,3 (± 11) años. Ocho pacientes (88,8%) presentaron MG de inicio tardío. Clínicamente 7 pacientes (77,7%) presentaron la forma ocular (grupo I) y 2 la generalizada (22,3%), uno leve (grupo IIa) y otro moderada (grupo IIb). Los síntomas oculares fueron las manifestaciones clínicas iniciales preponderantes (88,8%). Sólo uno de los pacientes presentó timoma. Los anticuerpos antirreceptores de acetilcolina (Ac-AchR) fueron positivos en todos los casos. Todos los pacientes recibieron tratamiento con piridostigmina, y en 5 pacientes (55,5%) se usaron además esteroides. No se produjo ninguna muerte, aunque en 3 enfermos (33,3%) los resultados del tratamiento fueron peores.
Conclusiones: es necesario cambiar el concepto clásico de MG como patología del adulto joven y considerarla, como refleja nuestro estudio, como una patología emergente en la población anciana. Creemos que la MG es una enfermedad que debemos conocer, dado que la detección y el tratamiento precoces consiguen generalmente una mejoría física y funcional del paciente mayor.