• El uso del capnógrafo ha supuesto un avance en la práctica clínica para un mejor manejo del estado ventilatorio del paciente de una forma sencilla. Además, en algunos casos puede valorar también la perfusión y el metabolismo.
• Se trata de un procedimiento no invasivo, que monitoriza la presión parcial de CO2 exhalado por el paciente en el tiempo, pudiendo emplearse en todo tipo de pacientes, desde neonatos hasta adultos, intubados y no intubados.
• Su aplicación más relevante es la confirmación de la correcta colocación del tubo orotraqueal, así como la detección precoz de una posible extubación accidental. Su empleo junto con la pulsioximetría nos da una información completa sobre el estado respiratorio del paciente.