Comentamos un caso acerca de una mujer de 71 años hipertensa que acude a Urgencias por la aparición de insuficiencia respiratoria aguda, disnea súbita, dolor torácico vago acompañado de hemoptisis. A la exploración se objetiva signos de trombosis venosa en el miembro inferior derecho. Se lleva a cabo una serie de pruebas complementarias destacando hipoxemia de 55 mmHg, valor de hipocapnia con valores de 24 mmHg y taquicardia sinusal a 120 lpm en el electrocardiograma (ECG). Las plaquetas y coagulación se encuentran dentro de los límites normales. Se obtuvieron valores de dímero D elevados 981 ng/ml y creatinina de 1,5 mg/dl. Tras la elevada sospecha clínica de tromboembolismo pulmonar la actuación óptima sería la administración de 5000 UI de heparina sódica y posteriormente solicitar un TAC helicoidal para confirmar el diagnóstico siendo la técnica de elección en pacientes sin insuficiencia renal ni alergia al contraste. Para el inicio de tratamiento anticoagulante basta con tener una sospecha fundada en los datos clínicos y pruebas de laboratorio
We present a case involving a 71-year-old hypertensive woman who presented to the Emergency Department with acute respiratory failure, sudden dyspnea, and vague chest pain accompanied by hemoptysis. Clinical examination revealed signs of venous thrombosis in the right lower limb. Complementary tests showed hypoxemia at 55 mmHg, hypocapnia at 24 mmHg, and sinus tachycardia at 120 bpm on electrocardiogram (ECG). Platelet and coagulation values were within normal limits. Elevated D-dimer levels at 981 ng/ml and creatinine at 1.5 mg/dl were recorded. Given the high clinical suspicion of pulmonary embolism, the optimal approach involved administering 5000 IU of sodium heparin followed by a helical CT scan, the diagnostic technique of choice in patients without renal insufficiency or contrast allergy. Initiating anticoagulant therapy is justified based on a well-founded suspicion supported by clinical and laboratory findings.