La cefalea postpunción dural (CPPD) es una complicación relativamente frecuente de la analgesia epidural periparto, causada por una fuga de líquido cefalorraquídeo tras la punción dural. Se diagnostica clínicamente y su manejo incluye prevención (uso de agujas atraumáticas, técnicas seguras) y tratamiento escalonado según la gravedad y evolución.
Los recursos terapéuticos van desde medidas conservadoras (hidratación, cafeína, gabapentina, corticoides) hasta intervenciones como el bloqueo del ganglio esfenopalatino y el parche hemático epidural (este último con tasas de éxito del 70 – 90%).
Post – dural puncture headache is a common complication of peripartum epidural analgesia, caused by cerebrospinal fluid leakage following dural puncture. It is clinically diagnosed, and its management includes prevention (use of atraumatic needles, safe techniques) and a stepwise approach base don severity and progression.
Therapeutic options range from conservative measures (hydration, caffeine, gabapentin, corticosteroids) to interventions such as sphenopalatine ganglion block and epidural blood patch, the latter achieving success rates of 70 – 90% and being considered the gold standard.