Las patologías de origen neurológico encierran un gran número de incógnitas respecto a su origen, la evolución y el tratamiento a aplicar con el fin de volver a la normalidad previa a la enfermedad. Los meningiomas, por su propia naturaleza conllevan una evolución impredecible, suponen un verdadero misterio tras la intervención aunque la resección sea total y sin que exista recidiva, como el caso que nos ocupa.
El abordaje del tratamiento fisioterápico desde el punto de vista del ámbito motor, basándonos en la ontogénesis del movimiento, tal y como el desarrollo humano evoluciona en su curso natural, pocas veces es posible plantearlo en los centros de rehabilitación por las condiciones de espacio, tiempo o ratio de pacientes/profesional.
El presente trabajo, pese a basarse en un único caso y teniendo en cuenta que cada caso es único, pretende aportar un punto de vista no tan usual en el tratamiento fisioterápico en este tipo de pacientes.
Señalar además que no es un tratamiento acabado, sino una revisión de 24 meses de trabajo, pues el proceso continua.