Alejandro Chicharro Parras, Raquel Jimeno Gallego, Alejandro Martín Arrabal, María José Vicente Altabás, Mario García Hermosín, Verónica Melguizo García, Damián García Navarro
El músculo subescapular es frecuentemente afectado por espasticidad en múltiples patologías originando el patrón típico de aducción y rotación interna de hombro, siendo una de las principales causas de dolor de hombro hemipléjico. Como tratamiento, la toxina botulínica tipo A es ampliamente utilizada demostrando seguridad y eficacia, sobre todo desde el desarrollo de la guía ecográfica, no obstante, por las características anatómicas de este músculo y su difícil abordaje, se han descrito varias vías de abordaje sin existir un consenso sobre cuál es mejor. El músculo subescapular presenta de 2 compartimentos (diferentes funciones) separados por una fascia. El superior es el principal rotador. Se describen en la literatura tres vías: antero-lateral o axilar, posteromedial y posterolateral. Todas han demostrado ser seguras en manos expertas con control ecográfico, presentando mejoría en espasticidad y dolor al utilizar toxina botulínica. Al ser un músculo grande se recomiendan varios puntos de infiltración. Su fascia limita la difusión siendo preciso tratar ambos compartimentos para un mayor efecto. La vía postero medial es la única que permite tratar ambos (ya que las demás no acceden al compartimento superior), aunque como desventaja no permite ver el final del trayecto de la aguja con los riesgos que implica. Como conclusión, desde nuestro conocimiento no existen estudios que comparen la efectividad de las distintas vías ecográficas. Cada vía tiene ventajas y desventajas, siendo la más segura la axilar, la más cómoda la posterolateral y la a priori más eficaz la posteromedial. Son precisos más estudios.
The subscapular muscle is frequently affected by spasticity in multiple pathologies, leading to the typical pattern of shoulder adduction and internal rotation, and is one of the main causes of hemiplegic shoulder pain. As a treatment, botulinum toxin type A is widely used, demonstrating safety and efficacy, especially since the development of ultrasound-guided application. However, due to the anatomical characteristics of this muscle and its challenging approach, several injection techniques have been described without a clear consensus on the best one. The subscapular muscle consists of two compartments (with different functions) separated by a fascia. The superior compartment is the primary rotator. The literature describes three approaches: anterolateral (axillary), posteromedial, and posterolateral. All have been proven safe in expert hands under ultrasound guidance, showing improvements in spasticity and pain when using botulinum toxin. Since it is a large muscle, multiple injection points are recommended. Its fascia limits diffusion, making it necessary to treat both compartments for a greater effect. The posteromedial approach is the only one that allows treatment of both compartments (as the others do not access the superior compartment), but its main disadvantage is the inability to visualize the needle’s final trajectory, posing certain risks. In conclusion, to our knowledge, no studies compare the effectiveness of the different ultrasound-guided approaches. Each technique has advantages and disadvantages: the axillary approach is the safest, the posterolateral is the most comfortable, and the posteromedial is theoretically the most effective. Further studies are needed.