María Luisa Valiente Millán, María Jesús Fernández Lerones, Estefanía Zardoya Cabo, Stella Maris Méndez Iglesias
• Las emociones forman parte del encuentro terapéutico y lo dotan de especial singularidad.
• Una adecuada gestión emocional mejora la relación médicopaciente, favorece la adherencia terapéutica, ayuda a manejar el estrés, contribuye a una comunicación más efectiva y repercute directamente en el bienestar personal.
• Las investigaciones en neurociencia enfatizan la importancia de la conciencia corporal para la experiencia emocional, el papel de la red cerebral, la conexión bioquímica entre cuerpo y mente o las bases para crear un entorno de seguridad y calma en la relación médicopaciente.
• Adueñarnos de nuestras emociones implica reconocerlas, comprenderlas, aceptarlas y regularlas adecuadamente.
• La compasión permite aceptar nuestras emociones como parte de la experiencia humana y reducir nuestro sufrimiento emocional.