El síndrome de las “tuberías oxidadas” es un síndrome raro, con poca bibliografía y reporte de casos al respecto, pero de carácter benigno, indoloro, generalmente bilateral y autolimitado. En la mayoría de los casos, este síndrome se cura espontáneamente en la primera semana del inicio de la lactancia. La importancia del reconocimiento del síndrome de tuberías oxidadas radica en poder descartar malignidad y disminuir el estrés en la madre y profesionales, así como en garantizar una alimentación adecuada al recién nacido.
“Rusty pipes” syndrome is a rare syndrome, with little literature or case reports on the subject, but it is benign, painless, generally bilateral and self-limiting. In most cases, this syndrome heals spontaneously within the first week of starting breastfeeding. The importance of recognizing rusty pipe syndrome lies in being able to rule out malignancy and reduce stress on the mother and professionals, as well as ensuring adequate nutrition for the newborn.