La anestesia libre de opioides (ALO) es una técnica anestésica que evita el uso de opioides sistémicos, empleando combinaciones de fármacos no opioides y técnicas analgésicas multimodales para controlar el dolor perioperatorio. Entre los principales fármacos utilizados se encuentran la ketamina, dexmedetomidina, lidocaína, sulfato de magnesio, antiinflamatorios no esteroideos (AINEs) y corticoides, con posologías adaptadas a las necesidades individuales.
La ALO beneficia especialmente a pacientes con tolerancia o adicción a opioides, apnea obstructiva del sueño (SAOS), enfermedades pulmonares crónicas y aquellos sometidos a cirugía oncológica, al evitar complicaciones asociadas a los opioides como depresión respiratoria, náuseas, vómitos y tolerancia al dolor. Además, se integra en protocolos ERAS (Enhanced Recovery After Surgery), promoviendo una recuperación más rápida y una menor estancia hospitalaria.
Pese a sus beneficios, su implementación requiere de una monitorización estricta y por supuesto, de una planificación personalizada. Entre los desafíos de la ALO destacan la necesidad de conocimientos especializados en dicha técnica, la variabilidad en la respuesta interindividual a los fármacos y la limitada disponibilidad de recursos en algunos centros.
En conclusión, la ALO representa una alternativa efectiva y segura para el manejo anestésico en pacientes seleccionados, ofreciendo ventajas significativas frente a los protocolos tradicionales con opioides. Sin embargo, su éxito depende de una adecuada capacitación y recursos disponibles.