Irene Lobatón Gallardo, María Castillo Lozano
Un embarazo planificado permite a las parejas prepararse física y emocionalmente para recibir a un bebé, reduciendo riesgos para la salud de la madre y el recién nacido. Algunos consejos clave incluyen una consulta con la matrona previa antes de intentar concebir, donde se recomienda una revisión para evaluar el estado general de salud y detectar condiciones como diabetes, hipertensión o deficiencias nutricionales que puedan requerir tratamiento previo.
Una adopción de hábitos saludables, como una dieta equilibrada, rica en ácido fólico, hierro y vitaminas, junto con la eliminación de hábitos nocivos como el tabaquismo, el consumo de alcohol o drogas, favorecen un embarazo más seguro. Mantener un peso saludable y realizar actividad física moderada también son esenciales. Prepararse psicológicamente y contar con apoyo emocional es fundamental para afrontar los cambios durante el embarazo.
Estos pasos ayudan a garantizar un embarazo saludable y una transición más preparada hacia la maternidad y la paternidad.
A planned pregnancy allows couples to prepare themselves physically and emotionally to welcome a baby, reducing health risks for both mother and newborn. Some key tips include a consultation with a midwife prior to trying to conceive, where a check-up is recommended to assess general health and detect conditions such as diabetes, hypertension or nutritional deficiencies that may require pre-treatment.
Adopting healthy habits, such as a balanced diet, rich in folic acid, iron and vitamins, together with the elimination of harmful habits such as smoking, alcohol or drug use, will favour a safer pregnancy. Maintaining a healthy weight and moderate physical activity are also essential. Psychological preparation and emotional support are essential to cope with the changes during pregnancy.
These steps help to ensure a healthy pregnancy and a more prepared transition to parenthood.