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María Antonia Parrado Fernández
Objetivo: El cáncer colorretal es una de las neoplasias con mayor incidencia a nivel mundial, surgiendo para su tratamiento técnicas cada vez más eficaces, como la disección submucosa endoscópica.
Esto lleva a la necesidad de analizar los cuidados posteriores con el fin de desarrollar un plan de cuidados estandarizado, analizando a su vez su evolución y complicaciones.
Método: Estudio observacional descriptivo y retrospectivo de 78 casos entre enero 2018 -diciembre 2023, extraído de las historias clínicas informatizadas.
Resultados: La utilización de esta técnica experimenta una curva ascendente en su uso para tratamiento y curación de las lesiones extensas diseminadas y sus subtipos, granular (42,3%) y no granular (35,89%). El 51,28% mujeres y el 48,71% hombres, con una edad media de 62,90 años. El 51,28% requieren ingreso de corta duración. En cuanto a la seguridad de la técnica, el 88,85% no tuvieron complicaciones, frente al 11,14% que sí, siendo la perforación el riesgo más frecuente.
Conclusiones: La evolución de nuevas técnicas en el tratamiento de los cánceres colorrectales, gástricos y esofágicos ponen en evidencia la necesidad de la actualización de los conocimientos y cuidados enfermeros, para unificar los criterios de cuidados.
Objective: Colorectal cancer is one of the neoplasms with the highest incidence worldwide, and increasingly effective techniques, such as endoscopic submucosal dissection, are emerging for its treatment.
This leads to the need to analyse aftercare in order to develop a standardised care plan, analysing its evolution and complications.
Methods: Descriptive and retrospective observational study of 78 cases between January 2018 - December 2023, extracted from computerised medical records.
Results: The use of this technique experienced an upward curve in its use for treatment and cure of extensive disseminated lesions and its subtypes, granular (42.3%) and non-granular (35.89%). 51.28% were women and 48.71% men, with a mean age of 62.90 years.
51.28% required short-term hospitalisation. Regarding the safety of the technique, 88.85% had no complications, compared to 11.14% who did, with perforation being the most frequent risk.
Conclusions: The evolution of new techniques in the treatment of colorectal, gastric and oesophageal cancers highlights the need to update nursing knowledge and care to unify care criteria.
